CRECER HACIA ABAJO
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¿Qué pasa cuando plantamos una semilla y pasan meses y no vemos que crezca ni siquiera un pequeño tallo verde? Yo pensaría en dos opciones: la tierra no es buena para sembrar o soy una pésima sembradora, ya que no vemos crecimiento ni nada que se le parezca.
Aunque déjame decirte que todo depende de la perspectiva con la que se mire, para esto vamos a hablar del bambú. Cuando una semilla de bambú es sembrada, pasan alrededor de 7 años para poder ver un pequeño tallo saliendo de la tierra, esto se debe a que durante esos 7 años la planta se encarga de crecer hacia abajo, y ¿cómo es eso posible? pues hace crecer sus raíces lo más profundo, es casi imposible arrancar uno de raíz. Lo más sorprendente de todo es que cuando el bambú hace crecer su raíz lo suficiente, comienza a crecer hacia arriba de manera desmedida, se dice que puede crecer hasta 30 metros por mes, y aún si lo cortas, volverá a crecer hasta los 30 metros en un mes.
A la mayoría de nosotros no nos gusta crecer hacia abajo, porque es un crecimiento que nadie nota, nadie nos va a dar halagos por eso; sin embargo, es el crecimiento más eficaz, porque cuando las raíces son profundas, nada nos puede arrancar fácilmente, podemos crecer seguros y firmes, y esto no sucede de la noche a la mañana.
Te voy a hacer la siguiente pregunta, ¿qué es más fácil de erradicar, un roble de 7 años o un bambú de 7 años? y ¿qué pasa si los talo a ambos por la mitad?
El roble aunque sea un árbol imponente, a sus 7 años no tiene raíces tan fuertes y si lo cortamos a la mitad, no crecerá de nuevo.
El bambú tiene la capacidad de generar nuevos brotes y crecer rápido aún después de ser cortado, cuando vienen circunstancias difíciles a nuestra vida y nos cortan las alas, cuando todo lo que hemos creído alcanzar desaparece ¿qué nos impide crecer de nuevo?, si tenemos raíces fuertes, es posible hacerlo.
“Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos…”
Isaías 44:3
Los renuevos son esas ramitas nuevas que vienen creciendo, así que cuando te corten por la mitad, cuando quieran destruir tu esperanza y creas que nunca vas a alcanzar lo que quieres, Dios ha prometido dar bendición sobre tus renuevos.
Así que busca una buena tierra, plántate y comienza a echar raíces, aunque nadie lo note ni lo admire, prepárate para lo que quieras alcanzar en cada área de tu vida y así puedas crecer fuerte, sin inestabilidades. Aún si la tierra donde te plantaste se volvió árida, Dios puede derramar lluvia sobre ella y bendecir tus renuevos en caso de que te corten.
Seamos como en bambú en las circunstancias difíciles, y no te dejes intimidar cuando veas robles crecer a tu alrededor y tu no tengas ni siquiera un tallito para presumir, porque cuando llegue la hora de ser talado, tu serás quien eche renuevos.