CONTACTO EXTRATERRESTRE
Hay muchas teorías acerca de si los extraterrestres existen o no, algunas personas piensan que son fantasmas, otros que son inventos para confundir a la humanidad, y algunos creen que verdaderamente existen. Me imagino que ya tienes tu propia teoría acerca de esto. A decir verdad, hay más extraterrestres en medio de nosotros de lo que pensamos, y si no crees que esto sea posible, te voy a describir en una experiencia personal algo que yo llamaría contacto extraterrestre.
Para ponerte en contexto, cuando esta experiencia sucedió estaba pasando por un momento muy crítico en mi vida. Todo lo que tenía se estaba desmoronando: mi familia era un desastre, sinceramente pasaba todo el tiempo que podía fuera de casa, para no lidiar tanto con los problemas que se daban allí; tenía muchos miedos e inseguridades, no me creía capaz de llegar muy lejos y siempre deseaba tener las cosas buenas que otros tenían, temía no ser aceptada por los demás por el hecho de no dar lo que todos esperaban o querían de mí, así que siempre me adaptaba a los demás, sin poder ser yo misma. Y ahí estaba yo, llena de vacíos que nada ni nadie lograba llenar, al parecer las fiestas no ahogan las penas como todos dicen.
Cuando todo eso pasaba, tuve esta experiencia fuera de este mundo, llegó un ser a mi vida que era completamente desconocido, un extraterrestre, y me hizo una propuesta descabellada, me propuso convertirme en uno de ellos, una completa locura pero no tenía nada qué perder, así que acepté. Cuando dije si, una luz tan brillante como el sol entró en mí, y pude ver claramente como esa luz iba uniendo todos los pedazos de mi corazón que estaba de por sí destrozado. En definitivo esto dolía muchísimo, me estaba transformando en alguien completamente diferente. Todo era tan lindo que me sentí completamente inmerecedora de una cosa así y en ese momento vi también todas las cosas malas que yo había hecho, que me llenaban de culpa y vergüenza, entonces lo más extraordinario sucedió, ese ser extraño tomó con sus manos todas esas cosas, las convirtió en arena, y sopló y los granos de arena fueron a dar al fondo del mar, ¡ya no estaban más!
Al momento pude ver los miedos ocultos en las sombras de mi ser salir corriendo, pude ver mis inseguridades ser opacadas por esa luz. Y entonces sentí algo completamente nuevo, sentí amor puro por primera vez, era lo más maravilloso que me podía haber pasado en toda mi vida, alguien me amaba, sin importar cómo yo era, me amaba sin límites, cada parte de mi. En ese momento ese ser transformó mi ADN, ahora sería parte de él.
Este ser me reveló su nombre, su nombre es Jesús, y puso su luz dentro de mí, lo recibí en mi corazón y desde entonces mi vida no es igual, puso de su ADN en mí y lo ha puesto en muchas personas, convirtiéndonos en seres extraterrestres, en hijos de Dios:
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”
Juan 1:12 RVR60
¿Quieres convertirte en alguien con un ADN fuera de este mundo? Jesús está dispuesto a hacerlo, Él vio mi corazón y a pesar de todo lo que había extendió su gracia, me perdonó, me dio su amor y una identidad. Estoy segura que hará lo mismo contigo. Anímate a tener tu propio contacto extraterrestre.
Al igual que Jesús, nosotros no somos de este mundo (Juan 17:16)
